En la batalla de los refugios seguros, el oro tiene la ventaja frente al bitcoin.
Desde DeepSeek hasta las guerras comerciales, los mercados financieros han tenido que lidiar con mucha incertidumbre y volatilidad durante las últimas semanas.
Pero mientras que el bitcoin ha actuado como una acción tecnológica, el oro ha aislado a los inversores de los estragos.
El lunes, cuando los aranceles de Trump a Canadá, México y China sacudieron a los inversores, el precio del metal amarillo alcanzó un nuevo récord por encima de los 2.820 dólares la onza, lo que impulsó las ganancias del año hasta la fecha para SPDR Gold Trust (GLD) al 7,5%.
En contraste, el precio del bitcoin cayó hasta los 91.000 dólares el lunes, cayendo hasta 6.000 dólares en una hora. Desde entonces, la criptomoneda se ha recuperado hasta los 99.000 dólares, pero sigue notablemente por debajo de su máximo histórico de 109.000 dólares.
Hay un par de formas de ver esto, pero en el debate sobre el “refugio seguro”, la reacción está orientada positivamente hacia los alcistas del oro. ¿De qué sirve un refugio seguro si no proporciona seguridad cuando más la necesitas?
Eso no significa que el bitcoin sea necesariamente una mala apuesta; es simplemente algo diferente. También es ciertamente posible que el bitcoin evolucione hasta el punto en que comience a actuar de manera más independiente del mercado de valores durante épocas de estrés, de manera similar al oro.
Pero eso aún no ha sucedido.
