El mercado inmobiliario se está enfriando después de dos años de crecimiento de precios.
Datos de una encuesta publicados por Fannie Mae mostraron que las personas esperan que los precios de las viviendas caigan un 0,4% durante 2023.
Entre el segundo trimestre de 2021 y el segundo trimestre de este año, el precio medio de la vivienda aumentó aproximadamente un 12 %.
Aparentemente ya ha comenzado una desaceleración en el crecimiento de los precios.
Datos recientes de Redfin mostraron que en agosto el promedio de las operaciones de venta se concretó por debajo de los precios publicados. También en julio, el índice de valor de la vivienda de Zillow cayó por primera vez en una década.
Uno de los principales impulsores del cambio de tendencia del mercado inmobiliario es el aumento de las tasas hipotecarias a medida que la Reserva Federal ha ido aumentando la tasa de interés de referencia para combatir la inflación.
Esta semana, la tasa promedio de una hipoteca de tasa fija a 30 años subió al 5,89 % (su nivel más alto desde 2008) y se espera que esa tendencia continúe (el 61 % de los encuestados por Fannie Mae dijo que cree que las tasas hipotecarias subirán más el próximo año).
Dado que los costos de los préstamos continúan aumentando, se vuelve cada vez más difícil para las familias concretar la compra de su casa.
Los compradores de viviendas están anticipando caídas en los precios y los posibles vendedores no están dispuestos a renunciar a su tasa hipotecaria fija más baja; esta combinación de factores contribuye a un mayor enfriamiento en ventas de viviendas hasta fin de año.